NOTA DE LA FRIKI-BLOGUERA: En ese post se inventan series y argumentos con los que poner ejemplos, no se adelanta ni destripa el final de ninguna serie del mundo mundial, y nunca se hará. Puedes leer el post con total tranquilidad ;)
Últimamente me estoy dando cuenta de que no me gusta comentar mucho la serie a la que estoy enganchada, hasta que no la he acabado de ver… Solo hay un motivo para eso; No puedo soportar que me destripen ni el más mínimo detalle. Saca lo peor de mi, junto a buscar sitio para aparcar y Aida Nízar.
Es que es muy peligroso, tú te estás tomando un cafecito tranquilamente y comentas – Estoy súper enganchada a la serie “nombre de una serie”, y alguien te dice - ¿En serio? ¿Has llegado a cuando el protagonista se queda en coma y la novia se quema a lo bonzo pensando que ha muerto? -.
Y tú te quedas ahí, con los ojos lagrimosos y un hilillo de voz, susurrando;
- ¿Cómo? (carraspeo pero no me sale la voz…), ¿Cómo…? ¿Cómo? ¿Pero qué? - Mirando alrededor, a la espera de que alguien me diga, ¡¡es broma!! – ¿pero eso es en la versión americana? Igual hay un plagio Turco o algo…. No, yo no he llegado a eso... -. Y en tu cabeza piensas, ¿esto me está pasando de verdad?
Ahí, tenemos a 2 tipos de personas. La persona que se agobia y se da cuenta de la metedura de pata y te dice- ¡Ah! Que igual no ¿eh? Que yo solo lo he visto a trozos, ¡igual era un sueño!! Ni caso, ¡que me lo han contado! No pasa nada de eso -. Y cierra la sombrilla de la terraza con su cabeza dentro.
Y la persona 2, que te dice,- ¿No has llegado? Jo, pues una pasada, tienes que verlo porque luego el tío se recupera y como ve que ella ha muerto, se pasa al bando de los malos y mata a su propio padre, el misionero. ¿Te acuerdas? No sé qué pasará ahora… Maja… ¿Tú qué crees?-.
Y tú, te quedas ahí, y no sabes qué hacer, porque lo que realmente quieres es llorar, pero en el fondo, le sacarías los ojos con la cucharilla del café, así que miras para otro lado, mordiéndote el labio, viendo imágenes fugaces de los protagonistas en sus mejores momentos, para dejar de verle la cara a la persona que te esta jodiendo tu friki-vida, y haces un poco el Hommer y pones música en tu cabeza, porque si le sigues mirando es probable que mañana salgáis las dos en GENTE… Así que haces de tripas corazón, y lloras por dentro.
Es que claro, tu llevas muchas horas de sueño atrasado, ya has visto 28 capítulos, ayer te acostaste a las 6 de la mañana compartiendo tus horas con tus “otros amigos” en tu “otra vida”, y de repente alguien en un minuto ¡te destripa tu “otro futuro”!.
Es como si te tomas un café con Rappel, y le dices – Pues me casé el año pasado-. Y él te responde, - En serio? Pues no te preocupes maja, porque hagas lo que hagas , el año que viene por estas fechas vas a estar divorciada y él va a estar con otra-.
¿Tú qué haces? ¿Te molestas en llegar a casa y hacerle a tu marido la cena y mimitos? Pues no, llegas a casa ya odiándole, por capullo.
Pues lo mismo. Yo seguiré viendo la serie, pero ya no será igual, es como ver una carrera de Formula 1 sabiendo quién va a ganar. Vamos, es como ver una carrera de Formula 1…
Tengo que decir que no solo las personas te destripan las series ¿eh? A veces los propios guionistas te la meten doblada. ¿Quién les dio la clase de TITULOS? El capitulo va de un batalla brutal, y lo llaman BATALLA VICTORIOSA. ¡Joder! Qué pasa, ¿que no queréis que la vea? ¿No os gusta cómo os ha quedado? Pero es que miras el siguiente capítulo y se llama TODOS JUNTOS DE NUEVO, hale, estate tranquila durante dos horitas, que ganan la batalla y no muere ninguno de los buenos.
O, en series menos sangrientas, esas amorosas, en la que a la protagonista le piden matrimonio, y justo ahí se miran fijamente y se acaba el capitulo. Y cuando ves el título del siguiente capítulo… LA BODA. ¿Me estáis vacilando? Así que ya tampoco miro los títulos, pongo los DVDs con los ojos cerrados, que si estoy con alguien flipa y me llama gilipollas, y ahí estamos, una gritando - ¿pero qué coño haces? ¡A la derecha! - y la otra a tientas buscando la ranura del DVD, que parecemos “No me chilles que no te veo “. (Uy, otro súper titulo, ¿de qué irá la peli?)
Bueno, a lo que íbamos, que me encanta llegar al final de las series sufriéndola, y luego lo paso fatal, despidiéndome… Cuando ví el último capítulo de Lost después de 4-5 años pendiente de cuándo salía la siguiente temporada… me quedó un vacio interior… La nada, ¡un humo negro!! La acabé una madrugada, por supuesto, y me tiré llorando 2 horas… dije, - ¿Ahora a qué espero en la vida? Mi otra ilusión del momento era volver a ver a Alonso ganar el mundial. Y entonces lloré mas, se me fueron los alicientes. (NOTA: Ese año ¿eh? A Alonso le quedan muchos años de Ave Fénix, aunque este año también me he tenido que buscar otros alicientes...)
Dicen que cuando se te muere una mascota no quieres tener otra, te parece una ofensa que te regalen una similar, pues yo igual. La gente me decía, - Jodeeer, ¡hay una serie nueva que es la leche! Kaña-mon, la tienes que ver - Y yo, les miraba en plan – ¡Que no quiero otra! Quiero ésta!¡ El protagonista se llama Jack? No ¿verdad? Y ¿hay uno gordito de rizos muy majo? No ¿verdad? Pues vaya mierda de serie, ¡no quiero verla!
Pero al final lo superas, y te enganchas a otra, ahora estoy a 18 capítulos del final de mi serie de culto actual, y ¡sé que voy a sufrir!! Pero no puedo evitar buscar huecos para esas 18 horas desesperadamente.
Es como cuando te gusta un tío y sabes que pasa de ti, pero quieres encontrártelo a toda costa, y cuando lo ves te llevas un disgusto de horror, porque está con otra… Pero no lo puedes evitar. Lo bueno en estos casos es que siempre tienes una amiga que te dice, - Bueno, está con esa, pero le gustas más tú-. Y tú dices, - Pues yo no creo… iban de la mano… - Y ella - Pero no iba contento… - Y tú, - Pero iban con un montón de gente, riéndose… - Y ella,- Pero tú eres más guapa… - Y tú – Ya, pero ella llevaba velo, y él chaqué… - Y tu amiga – ¡Pues ya ves que tontería!-.
El similar en las series es que alguien te diga en tu momento crisis-del-fin-de-mi-serie; - ¡He oído que van a hacer una peli!! ¡Contando la precuela, y la secuela! - Y tú ya te vas contenta a la cama, porque ya tienes algo a lo que esperar. ¡A la peli! En el fondo sabes que es mentira, como lo del chico que te mola, pero a quién le importa ese pringado sabiendo que ¡vas a volver a la isla!
Últimamente me estoy dando cuenta de que no me gusta comentar mucho la serie a la que estoy enganchada, hasta que no la he acabado de ver… Solo hay un motivo para eso; No puedo soportar que me destripen ni el más mínimo detalle. Saca lo peor de mi, junto a buscar sitio para aparcar y Aida Nízar.
Es que es muy peligroso, tú te estás tomando un cafecito tranquilamente y comentas – Estoy súper enganchada a la serie “nombre de una serie”, y alguien te dice - ¿En serio? ¿Has llegado a cuando el protagonista se queda en coma y la novia se quema a lo bonzo pensando que ha muerto? -.
Y tú te quedas ahí, con los ojos lagrimosos y un hilillo de voz, susurrando;
- ¿Cómo? (carraspeo pero no me sale la voz…), ¿Cómo…? ¿Cómo? ¿Pero qué? - Mirando alrededor, a la espera de que alguien me diga, ¡¡es broma!! – ¿pero eso es en la versión americana? Igual hay un plagio Turco o algo…. No, yo no he llegado a eso... -. Y en tu cabeza piensas, ¿esto me está pasando de verdad?
Ahí, tenemos a 2 tipos de personas. La persona que se agobia y se da cuenta de la metedura de pata y te dice- ¡Ah! Que igual no ¿eh? Que yo solo lo he visto a trozos, ¡igual era un sueño!! Ni caso, ¡que me lo han contado! No pasa nada de eso -. Y cierra la sombrilla de la terraza con su cabeza dentro.
Y la persona 2, que te dice,- ¿No has llegado? Jo, pues una pasada, tienes que verlo porque luego el tío se recupera y como ve que ella ha muerto, se pasa al bando de los malos y mata a su propio padre, el misionero. ¿Te acuerdas? No sé qué pasará ahora… Maja… ¿Tú qué crees?-.
Y tú, te quedas ahí, y no sabes qué hacer, porque lo que realmente quieres es llorar, pero en el fondo, le sacarías los ojos con la cucharilla del café, así que miras para otro lado, mordiéndote el labio, viendo imágenes fugaces de los protagonistas en sus mejores momentos, para dejar de verle la cara a la persona que te esta jodiendo tu friki-vida, y haces un poco el Hommer y pones música en tu cabeza, porque si le sigues mirando es probable que mañana salgáis las dos en GENTE… Así que haces de tripas corazón, y lloras por dentro.
Es que claro, tu llevas muchas horas de sueño atrasado, ya has visto 28 capítulos, ayer te acostaste a las 6 de la mañana compartiendo tus horas con tus “otros amigos” en tu “otra vida”, y de repente alguien en un minuto ¡te destripa tu “otro futuro”!.
Es como si te tomas un café con Rappel, y le dices – Pues me casé el año pasado-. Y él te responde, - En serio? Pues no te preocupes maja, porque hagas lo que hagas , el año que viene por estas fechas vas a estar divorciada y él va a estar con otra-.
¿Tú qué haces? ¿Te molestas en llegar a casa y hacerle a tu marido la cena y mimitos? Pues no, llegas a casa ya odiándole, por capullo.
Pues lo mismo. Yo seguiré viendo la serie, pero ya no será igual, es como ver una carrera de Formula 1 sabiendo quién va a ganar. Vamos, es como ver una carrera de Formula 1…
Tengo que decir que no solo las personas te destripan las series ¿eh? A veces los propios guionistas te la meten doblada. ¿Quién les dio la clase de TITULOS? El capitulo va de un batalla brutal, y lo llaman BATALLA VICTORIOSA. ¡Joder! Qué pasa, ¿que no queréis que la vea? ¿No os gusta cómo os ha quedado? Pero es que miras el siguiente capítulo y se llama TODOS JUNTOS DE NUEVO, hale, estate tranquila durante dos horitas, que ganan la batalla y no muere ninguno de los buenos.
O, en series menos sangrientas, esas amorosas, en la que a la protagonista le piden matrimonio, y justo ahí se miran fijamente y se acaba el capitulo. Y cuando ves el título del siguiente capítulo… LA BODA. ¿Me estáis vacilando? Así que ya tampoco miro los títulos, pongo los DVDs con los ojos cerrados, que si estoy con alguien flipa y me llama gilipollas, y ahí estamos, una gritando - ¿pero qué coño haces? ¡A la derecha! - y la otra a tientas buscando la ranura del DVD, que parecemos “No me chilles que no te veo “. (Uy, otro súper titulo, ¿de qué irá la peli?)
Bueno, a lo que íbamos, que me encanta llegar al final de las series sufriéndola, y luego lo paso fatal, despidiéndome… Cuando ví el último capítulo de Lost después de 4-5 años pendiente de cuándo salía la siguiente temporada… me quedó un vacio interior… La nada, ¡un humo negro!! La acabé una madrugada, por supuesto, y me tiré llorando 2 horas… dije, - ¿Ahora a qué espero en la vida? Mi otra ilusión del momento era volver a ver a Alonso ganar el mundial. Y entonces lloré mas, se me fueron los alicientes. (NOTA: Ese año ¿eh? A Alonso le quedan muchos años de Ave Fénix, aunque este año también me he tenido que buscar otros alicientes...)
Dicen que cuando se te muere una mascota no quieres tener otra, te parece una ofensa que te regalen una similar, pues yo igual. La gente me decía, - Jodeeer, ¡hay una serie nueva que es la leche! Kaña-mon, la tienes que ver - Y yo, les miraba en plan – ¡Que no quiero otra! Quiero ésta!¡ El protagonista se llama Jack? No ¿verdad? Y ¿hay uno gordito de rizos muy majo? No ¿verdad? Pues vaya mierda de serie, ¡no quiero verla!
Pero al final lo superas, y te enganchas a otra, ahora estoy a 18 capítulos del final de mi serie de culto actual, y ¡sé que voy a sufrir!! Pero no puedo evitar buscar huecos para esas 18 horas desesperadamente.
Es como cuando te gusta un tío y sabes que pasa de ti, pero quieres encontrártelo a toda costa, y cuando lo ves te llevas un disgusto de horror, porque está con otra… Pero no lo puedes evitar. Lo bueno en estos casos es que siempre tienes una amiga que te dice, - Bueno, está con esa, pero le gustas más tú-. Y tú dices, - Pues yo no creo… iban de la mano… - Y ella - Pero no iba contento… - Y tú, - Pero iban con un montón de gente, riéndose… - Y ella,- Pero tú eres más guapa… - Y tú – Ya, pero ella llevaba velo, y él chaqué… - Y tu amiga – ¡Pues ya ves que tontería!-.
El similar en las series es que alguien te diga en tu momento crisis-del-fin-de-mi-serie; - ¡He oído que van a hacer una peli!! ¡Contando la precuela, y la secuela! - Y tú ya te vas contenta a la cama, porque ya tienes algo a lo que esperar. ¡A la peli! En el fondo sabes que es mentira, como lo del chico que te mola, pero a quién le importa ese pringado sabiendo que ¡vas a volver a la isla!
Oye, Kaña-mon, ya te he dicho lo que pasa en la tercera temporada de "In treatment"?? mu fuerte...
ResponderEliminarjajaja!!
Nuevo post genial, como siempre!! Besazo!!
Madre mía, me siento tan tan identificada!!! Cuando termina la serie del momento, la que es tu razón de vivir, sólo ves desierto por delante; sin ilusiones, sin nuevos proyectos... A mí el disgusto me suele durar un día (mi madre dice que eso es porque cicatrizo muy bien :)
ResponderEliminarUn beso!